¿Te toca dar el discurso para una boda y no sabes por dónde empezar? Pues eso sí que es un problema y no cuando te dice tu pareja: “Tenemos que hablar”. Porque sabes que después de eso no tienes que hablar: tienes que dormir en el sofá.
Pero tú no quieres quedar mal en la boda y para eso necesitas dar el discurso de bodas perfecto. ¿Y cuál es el discurso de bodas perfecto? Sencillamente el que hacemos nosotros y sobre el que puedes pedirnos información en info@tododiscursos.com. ¿Y por qué es perfecto? Porque es personalizado para los novios. Enviamos un cuestionario para que nos cuentes datos y anécdotas sobre los novios y en base a eso elaboramos un discurso divertido, emotivo o un monólogo sobre la vida de los novios que hará reír tanto como cuando les dices a los del restaurante que quieres un menú baratito para la boda, o también un discurso emotivo que hará llorar tanto… como a tu padre cuando le dices que tiene que pagar el menú ya no tan baratito para la boda.
¿Quieres ser la sensación de la boda? Pues entonces olvídate de combinar americana roja con pajarita porque se la hayas visto en una peli a Mario Casas, porque a ti no te va a quedar igual… y de los tirantes ni hablamos. Pero si de verdad quieres ser la sensación con un discurso que haga reír a los novios, no dudes en contactar con nosotros y tu intervención será de lo que más se recuerde de la boda… a no ser que lleves pantalones pesqueros, que se va a recordar pero para mal.